Realizamos una revisión a dos loris pigmeo para comprobar su estado de salud
hace 2 añosNuestro equipo de expertos de Terra Natura Benidorm ha realizado esta mañana un examen veterinario completo a dos loris pigmeos (Nycticebus pygmaeus), que habitan en nuestras instalaciones desde 2018. Esta especie se encuentra en estado vulnerable de conservación según la UICN, por esta razón se aplica un protocolo de seguimiento y control veterinario con el objetivo de vigilar su estado de salud y grado de bienestar general.
La revisión de Tiki y Nomi, así se llaman estos dos loris pigmeos, se ha iniciado con el pesaje de ambos animales para vigilar este parámetro. Estos animales tienden al sobrepeso, por lo que es importante controlar la evolución de este indicador para garantizar su salud. En el caso de Tiki, que es especialmente glotón, se le va a modificar la dieta, reduciendo la fruta y aportando más verdura para disminuir la ingesta de azúcar y así conseguir que reduzca un poco su peso. Tiki ha pesado 750 gramos, y debe perder 200 gramos para estar en su peso ideal. Nomi ha tenido un peso adecuado.
Dentro del examen veterinario, también se ha mirado el estado del pelaje de estos loris pigmeos asiáticos, que se pueden observar dentro de la exposición permanente de criaturas venenosas de Terra Natura Benidorm. Este mamífero es el único primate del mundo que posee una toxina venenosa. Su saliva dispone de una toxina con la que impregna a las crías para ahuyentar a posibles depredadores.
Asimismo, el veneno que poseen les sirve para defenderse de los depredadores que son más rápidos que ellos. Los loris lamen la zona para pasar el veneno desde los dientes hasta el resto de su cuerpo. Cuando realizan una mordida inoculan el veneno, causando una gran inflamación en la zona, necrosis o incluso un shock anafiláctico que puede conducir a la muerte.
En total, en Terra Natura Benidorm contamos con cuatro individuos de la especie, dos nacidos en 2010 y con Tiki y Nomi, que fueron trasladados desde el zoo de Zurich hace cuatro años. Entre las principales amenazas de conservación de esta especie se encuentra el ser humano, ya que destruye su hábitat y comercializa esta especie de manera ilegal como mascotas exóticas o para su uso en la medicina tradicional china.